¿Cómo saber si necesito un psicólogo?

Si tienes un médico de cabecera, ¿por qué no un psicólogo?

En primer lugar, ir al psicólogo puede ser útil en cualquier situación.

A continuación veremos en qué casos es importante consultar con un profesional de la psicología:

• Te haces daño a ti o haces daño a los demás. Ya sean agresiones físicas o verbales.
• Has vivido una situación de maltrato o violencia: desde violencia doméstica hasta agresiones sexuales, pasando por el acoso laboral.
• Has vivido una situación traumática: desde un atentado hasta un accidente de tráfico.
• Has sufrido una pérdida: puede ser que un familiar fallezca, que pierdas tu trabajo o tu pareja.
• Has recibido un diagnóstico impactante: el diagnóstico de una enfermedad grave, por ejemplo.
• Tienes problemas de sueño: duermes poco o demasiado desde hace un tiempo y esto no es habitual en ti.
• Tu apetito ha cambiado drásticamente: tanto si sientes mucha más hambre de la habitual o mucho menos.
• Te sientes muy cansado/cansada: este es otro de los síntomas característicos de los trastornos psicológicos.
• No tienes ganas de hacer nada: la falta de interés, de motivación y de voluntad para realizar tareas son síntomas típicos de trastornos depresivos.
• Te cuesta concentrarte y tomar decisiones: si sientes dificultad a la hora de pensar, razonar o tomar decisiones.
• Tienes problemas de memoria: la falta de memoria o la percepción de la misma también es un síntoma de problemas y enfermedades psicológicas.
• Sientes mucha más energía de lo habitual: si sientes que piensas más rápido de lo normal (taquipsiquia), que tienes mucha energía, que no necesitas dormir y te sientes muy capaz de llevar a cabo proyectos complejos.
• Hay cosas que te preocupan mucho: sientes que te preocupas mucho más que los demás y hay ciertos temas que te abruman tanto que interfieren en tu día a día. Pasas mucho tiempo pensando en el mismo tema y te sientes nervioso o nerviosa habitualmente.
• Hay alguna situación puntual que te desborda: tienes un pico de estrés debido a problemas familiares, cambios laborales, una ruptura de pareja.
• No puedes desarrollar tu vida con normalidad: Por ejemplo, tienes un miedo que no te permite tener una vida social saludable o tu estado anímico te impide desempeñar tus tareas laborales.
• No puedes disfrutar de la vida: La incapacidad para sentir placer y disfrutar de actividades que antes se disfrutaban (aficiones, sexualidad…)
• Tu estado de ánimo cambia constantemente: sientes que no tienes punto medio, siempre explotas, no logras conseguir un equilibrio en tu vida.
• Tienes problemas con tu pareja que no conseguís manejar: ya sean problemas de comunicación, problemas sexuales…
• No quieres estar con tu pareja pero no puedes dejarla. Si hay malestar, pero no puedes dejarlo, puede que te encuentres en una situación dependencia emocional.
• Hace mucho que no tienes pareja a pesar de buscarla: sientes malestar por el hecho de no tener pareja y llevas tiempo buscándola.
• Tienes problemas en el trabajo: no te sientes a gusto con el trabajo que realizas, soportas una gran carga de trabajo, pero tampoco sabes poner límites.
• No tienes amistades y eso te preocupa:

Otros puntos a tener en cuenta

Cómo saber si necesitas un psicólogo:

• Pierdes los nervios con tus hijos/as a menudo: igual que en el rol de pareja, en el rol de padre o madre, se pueden observar nuestras vulnerabilidades. Criar es una tarea compleja que requiere equilibrio psicológico y muchas competencias.
• Te comparas con los demás constantemente: la comparación es una señal de que tu autoestima es negativa y/o inestable.
• Tienes alguna adicción: consumo de sustancias, juego patológico, compras compulsivas, adicción al trabajo…
• Tu entorno te lo recomienda. Si varias personas cercanas te sugieren acudir a un profesional, es motivo para hacerlo.
• No sabes cómo orientar tu vida. Cuando no sabes qué es lo que te gusta, nada te apasiona, no sabes qué estudiar, no sabes qué quieres hacer con tu vida…
• Tienes hábitos poco saludables: tabaco, alcohol, comida basura, vida sedentaria. El consumo de sustancias, la mala alimentación, el descuido personal, son hábitos que denotan problemas de autoestima.
• Quieres conocerte y entenderte mejor. Descubrirás cargas emocionales que quizás ni sabías que tenías, pero que estaban condicionando tu forma de actuar.
• Quieres tratar pacientes: en caso de que quieras dedicarte a la psicología clínica o de la salud es importante pasar por un proceso de psicoterapia para ser consciente de tus propias cuestiones internas y que no interfieran en terapia, siendo así un buen profesional.

Espero que hayas podido aclarar tus dudas sobre cómo saber si necesito ir a un psicólogo o profesional de la psicología.

Silvia Asencio

Psicoservice – Tu psicóloga en Fuengirola y Mijas

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